La palabra de Dios es un llamado a la acción de principio a fin, a
obrar rectamente y alejarnos de
pecar deliberadamente, Mateo 16:24 nos dice: "Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame." y aunque para todos es evidente lo que nos dice, prestaremos atención al contexto para entender más a fondo lo que nos manda y las implicaciones que tiene el no hacerlo.
Cristo empieza diciendo "Si alguno quiere venir en pos de mi" aquí Cristo está utilizando el "si" sin tilde, por lo tanto no es un si afirmativo sino condicional, es decir viene Cristo a plantearnos condiciones para que realmente estemos en pos de él siguiéndole; pues
muchos creen que siguen a Cristo pero sus obras demuestran con frecuencia lo contrario. Un "si" condicional es como cuando decimos: "si alguno quiere comprarme esta naranja tendrá que pagar 50 centavos", o cuando decimos: "si alguno quiere ser atendido haga fila".
Requisitos de Mateo 16:24 para seguir a Cristo
"Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo", el negarnos a nosotros mismos es negar nuestra carne y dejar atrás todo lo que sea necesario dejar atrás porque se oponga a la senda estrecha que lleva a Cristo; todo aquello que se oponga al camino de santidad que observamos en el Evangelio, negarnos a nosotros mismos es negar nuestra carne, deseos, tradiciones, vicios, prejuicios doctrinales, eso es negarnos a nosotros mismos.
Nadie que viva frecuentando los frutos de la carne puede decir que se ha negado a si mismo, sino que continúa esclavizado a su carne, misma que le hace pecar con frecuencia y que por lo tanto se ha enseñoreado de su espíritu siendo más fuerte que él. El que peca en ese momento está negando a Cristo en lugar de negarse a si mismo, 1 Juan 3: "todo el que peca, ni le ha visto ni le ha conocido.".
Tomar nuestra cruz representa tomar todas las dificultades de nuestro diario vivir y a pesar de ellas seguir a Cristo en santidad, no poniendo excusas para detenernos, porque excusas siempre habrá para dejar de seguir a Cristo, pero ninguna excusa es válida. ¿Cómo sabemos que tomar esta cruz es algo que debemos de hacer cada día? porque en Lucas nos dice 9:23: "Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz
cada día, y sígame.".
Contexto de Mateo 16:24
En el versículo que le sigue, este es el 25 vemos que también dice: "Pues ¿qué provecho obtendrá un hombre si gana el mundo entero, pero pierde su alma? O ¿qué dará un hombre a cambio de su alma?", es decir que si queremos seguirle tendremos que negar los deseos de nuestra carne porque de nada los servirá ganar las cosas que el mundo nos ofrece e incluso el mundo entero, pero perdiendo nuestra alma. ¿Por qué habla de perder el alma? porque si no nos negamos a nosotros mismos perderemos nuestra alma sin importar en que hayamos creído.
Pasando al versículo 26 también nos dice: "Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles; y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.", este versículo nos permite ver que se está hablando del juicio final tras la segunda venida de Cristo.
Quizá se pregunte usted, ¿por qué es importante leer los versículos 25 y 26 para explicar mejor el 24?, esto se debe a que son el contexto del 24, el contexto de un versículo son los otros versículos que le rodean y ayudan a que entendamos de que se está hablando. El 24 nos dice que tenemos que oponernos a los deseos de la carne para poder decir que estamos en pos de Cristo, el 25 nos dice que aunque esto puede ser difícil es peor perder el alma por no hacerlo, y el 26 nos dice que ese día cuando se sabrá si se ha perdido el alma o se ganó la misma será en la venida de Cristo cuando nos pagará a cada uno conforme a nuestras obras.
¿Cuál será la paga de nuestras obras?, decía el versículo 25 que será perder o ganar nuestra alma. ¿Que tenemos que hacer para que nuestra alma no se pierda?, decía el versículo 24 que debemos de negarnos a nosotros mismos, tomar nuestra cruz y seguir a Cristo; esto es en santidad.
Deja un comentario